

noviembre
2017.
Volumen
16
-
N
°
70
intubación endotraqueal y la monitorización de
la presión intracraneana mediante colocación de
transductor.
Ascitis:
restricción en el aporte de sal. Diurético:
inicialmente espironolactona
2
a
3
mg/kg/día
c/
8
-
12
horas oral. Furosemida se podría adicionar
en dosis de
0,5
a
1
mg/kg/dosis c/8 horas,
sólo sino hay respuesta a espironolactona y con
monitorización permanente de natremia y kalemia.
En el manejo de ascitis refractaria, se ha intentado
prótesis de Shunt portosistémico intrahepático
transyugular (TIPS). Siguiente alternativa es el
trasplante hepático.
Hiperamonemia: evitar infecciones y hemorragia
digestiva. Administración de lactulosa y
antibióticos no absorbibles (Neomicina y
rifaximina) tienen el objetivo de disminuir el aporte
de amonio, sin embargo actualmente no todos
apoyan el uso. En adultos existen estudios
con L-ornitina fenil acetato (LOPA).
Prevención Hemorragia digestiva alta:
Administración profiláctica de inhibidores de la
bomba de protones para la prevención de
hemorragia gastrointestinal. Omeprazol en dosis
de
1
a
2
mg/kg/día EV.
Síndrome hepatorenal:
la prevención es
fundamental evitando factores precipitantes como
infección, hemorragia digestiva y paracentesis
de gran cuantía. Sospechar frente al aumento
de creatininemia, disminución de filtración
glomerular y ascitis refractaria.
Transporte:
Trasladar de forma segura y oportuna
a una Unidad de Cuidados Intensivos Pediátricos
en un centro de TH. Si el niño presenta EH grado
III o IV debe ser intubado previo al traslado
con acceso vascular. Monitorización continua
de frecuencia cardíaca, oximetría de pulso y
presión arterial durante el transporte. Disponer
durante el traslado de drogas vasoactivas por
si fuera necesaria su utilización.
Manejo específico
El tratamiento específico debe administrarse si la
causa subyacente de insuficiencia hepática aguda
ha sido determinada, por ejemplo, hepatitis
autoinmune, tirosinemia, Hepatitis Aloinmune,
galactosemia o sobredosis de paracetamol. El
realizar la terapia específica aumenta la
probabilidad de sobrevida del paciente con el
órgano nativo y disminuye la necesidad de
trasplante hepático.
Instaurar terapias de detoxificación y de
regeneración
MARS (Molecular Adsorbent Recirculating System)
es un soporte hepático extracorpóreo que puede
mejorar la función renal y la supervivencia en
pacientes con síndrome hepatorenal.
Pronosticar necesidad de Trasplante Hepático
Desde la introducción del Trasplante Hepático (TH)
como opción terapéutica en IHA la sobrevida
alcanza el
60
a
80
%. El desafío consiste en
identificar precozmente los niños que requerirán
TH.
El TH de emergencia debe ser considerado en un
paciente con encefalopatía mayor a grado II,
asociada a factor V <
20
% o INR
≥
2
.
Es muy importante definir ¿Qué niños requerirán
Trasplante hepático? ya que implica riesgo
quirúrgico e inmunosupresión permanente.
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