Table of Contents Table of Contents
Previous Page  62 / 80 Next Page
Information
Show Menu
Previous Page 62 / 80 Next Page
Page Background

60

Hallazgos radiológicos

La Rx de tórax

(Figura 1) muestra imágenes lineales radiolúcidas que rodean el mediastino y se dirigen al cuello (flechas). En la proyección lateral, el timo está desplazado hacia anterior por aire (flechas).

Estos hallazgos descritos son característicos de

un neumomediastino.

El examen se complementó con una Tomogra-

fía Computada de Tórax (Figura 2), que permite

una mejor demostración anatómica del neumo-

mediastino.

Diagnóstico

Neumomediastino espontáneo.

Discusión

El neumomediastino espontáneo (NME) fue

descrito por Hamman (1939) en población adulta,

bajo el nombre de “enfisema mediastínico espon-

táneo”

1-3

. Se define como la presencia de aire li-

bre en el mediastino que aparece sin antecedentes

de trauma torácico, procedimientos quirúrgicos

de la vía aérea o digestiva, ventilación mecánica

o cateterización

2,3

.

En población pediátrica la literatura es esca-

sa, con una incidencia reportada de 1/8.000 a

1/15.000 y dos

peaks

de edad observados entre

6 meses y 4 años y otro entre 15 y 18 años

4,5

. En

adultos jóvenes la incidencia observada es mayor,

de aproximadamente 1/800

1,6

.

En pediatría, el NME es más frecuente en el

sexo masculino y un 60% ocurre en el período

neonatal

1,4

. El asma es considerado el principal

factor predisponente (22%) y la sintomatología

más frecuente es dolor torácico, dolor cervical,

odinofagia, disnea, tos, dolor irradiado a la región

dorsal

1,2,7

.

Al examen físico el principal hallazgo es ge-

neralmente enfisema subcutáneo en el cuello

1,6,9

.

Los factores desencadenantes más frecuentes del

NME son broncoespasmo, tos, infecciones respi-

ratorias, acceso de vómitos, aspiración de cuerpo

extraño, ejercicio físico o cualquier situación

que induzca una maniobra de Valsalva

1,4

. En un

33% de los casos es idiopático

1

, como ocurrió en

nuestro paciente.

El efecto Macklin, descrito en 1939, intenta

explicar la fisiopatología de la fuga aérea en

el NME

5

. Los gradientes de presión provocan

ruptura alveolar, lo que condiciona a su vez es-

cape aéreo al intersticio y linfáticos pulmonares

(enfisema intersticial), el cual diseca a través de

los septos interlobares adyacentes a los vasos

sanguíneos y sistema bronquial hasta llegar al

hilio y de ahí al mediastino y a otras regiones

anatómicas

1,3,5,8

.

El enfrentamiento inicial debe ser hecho con

radiografía (Rx) de tórax en proyecciones ante-

roposterior (AP) y lateral, la que es suficiente

para el diagnóstico hasta en 99% de los casos

1,4,9

.

Los hallazgos dependerán de la cantidad de aire

en el mediastino. Pueden observarse finas líneas

radiolúcidas paralelas al borde del mediastino en

la proyección AP y lateral, elevación del timo,

delimitación del cayado aórtico. También pue-

de detectarse el signo del diafragma continuo,

producido por la interposición de aire entre el

corazón y el diafragma. Esto no debe confun-

dirse con neumopericardio donde generalmente

se visualiza el aire dentro del saco pericárdico y

J. Olivos P. et al.

Figura 2.

Tomografía Computada de Tórax con medio de contraste endovenoso y cortes axiales a nivel de los vasos

supraaórticos

(a)

y del tronco de la arteria pulmonar

(b)

muestra extenso aire extraalveolar que diseca los distintos planos

del mediastino (flechas).

Rev Chil Enferm Respir 2018; 34:59-61