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El balance ácido-base es fundamental para mantener la vida. Muchas enzimas y procesos de

transporte transmembrana, son altamente dependientes de la concentración de ion hidrógeno.

Cambios en este ion, alteran de esta manera, virtualmente todas las funciones celulares. Es por

esto que, la concentración de ion hidrógeno se mantiene estrechamente en cifras de 40 nmol/L

(pH = 7,4; rango compatible con la vida: 16-160 nmol/L; pH 6,8-7,8), gracias a un sistema

altamente eficaz y extremadamente eficiente. Para destacar esto, cabe mencionar que estas

concentraciones equivalen a una millonésima parte de las concentraciones de sodio, potasio,

cloro y bicarbonato, expresadas en mmol/L. Por esto, se expresa como el logaritmo negativo de

la concentración de H

+

, o pH.

Cada día se generan grandes cantidades de ácido que deben ser excretados, metabolizados o

tamponados, para evitar una acidemia fatal. Del metabolismo de carbohidratos y ácidos grasos,

destaca la producción de cerca de 15.000 mmol diarios de CO

2

, que al combinarse con agua

forma ácido carbónico (H

2

CO

3

) y ácidos no volátiles provenientes del metabolismo de los aminoá-

cidos que contienen azufre (ácido sulfúrico) y de los fosfolípidos (ácido fosfórico), produciéndose

aproximadamente 1 mEq/kg de ácido al día (50-100 mEq/día en un adulto, 2 a 3 mEq/kg en niños,

con dieta promedio).

Este fino balance, se logra mediante tres mecanismos:

1. Amortiguación química, por los buffers intra y extracelulares.

a. Intracelulares y óseo: proteínas, fosfatos orgánicos e inorgánicos y hemoglobina. El hueso

también cumple rol de buffer, hecho especialmente importante en la acidosis metabólica

crónica que ocurre en la enfermedad renal crónica.

b. Extracelular: Bicarbonato del LEC.

2. Control de la presión parcial de CO

2

, mediante la regulación de la ventilación alveolar.

3. Control de la concentración plasmática de HCO

3

, mediante la regulación de la excreción renal

de H

+

.

El estado ácido-base se puede expresar a través de la concentración de los componentes del

sistema buffer más abundante en el extracelular: el sistema bicarbonato/ácido carbónico. De

acuerdo a la fórmula de Henderson-Hasselbalch:

pH = 6,1 + log

[

HCO

3

]

(Ecuación 1)

0,03 PCO

2

De la ley de acción de masas, se deriva la siguiente ecuación que, en clínica, se utiliza por su

simplicidad y permite calcular la concentración de H

+

:

[H

+

] = 24x

PCO

2

(Ecuación 2)

HCO

3

Donde la PCO

2

representa el componente respiratorio de la ecuación y el HCO

3

el componente

metabólico.

Acidemia

corresponde a un pH < 7,36, mientras que

alcalemia

corresponde a un pH > 7,44.

Los procesos que llevan a cambios de pH por debajo o por sobre de los valores normales, se cono-

cen como

acidosis

y

alcalosis

. Estos producen cambios en las concentraciones de CO

2

y HCO

3

.

Alteraciones del equilibrio ácido-base I

Acidosis

Gonzalo Mayorga V.

CAPÍTULO 5