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Diagnósticos menos frecuentes: Síndrome hemolítico urémico, hipercalcemia, neurofibroma-
tosis, tumores neurogénicos, feocromocitoma, hipertiroidismo, hemorragia intraventricular, etc.
La hipertensión del delantal blanco está presente entre el 1 y el 44% de los pacientes. Estos
presentan cifras tensionales elevadas en el centro de salud y normales en su casa.
Anamnesis y examen físico
Antecedentes del paciente:
Antecedentes perinatales, permanencia en UCI, cateterización
umbilical, enfermedades renales: infecciones urinarias, displasia renal, glomerulopatías.
Urológicos:
Reflujo vésico ureteral, malformaciones.
Enfermedades sistémicas:
Lupus. Ingesta de drogas.
Antecedentes familiares:
Hipertensión, cardiopatías, diabetes mellitus. Dislipidemias, enfer-
medades renales o endocrinológicas.
Síntomas:
Cefalea, mareos, vértigo, convulsiones, baja de peso u obesidad, edema, cambio
de coloración de la orina, palidez.
Examen físico:
Palidez, rash, lesiones vasculíticas, acantosis nigricans, neurofibromas, dife-
rencia entre pulsos proximales y distales, cataratas, realizar fondo de ojo, palpar tiroides. En ab-
domen buscar masas o soplos. En genitales evaluar virilización. Evaluación neurológica buscando
hemiparesias o parálisis de nervios craneanos.
Exámenes de laboratorio
La historia clínica nos orienta al diagnóstico y de acuerdo a éste pedir exámenes de laboratorio.
Exámenes basales: Función renal, perfil bioquímico y lipídico, hemograma, orina completa,
albuminuria, ecotomografía renal y vesical con doppler, eco cardiograma. Medición de renina y
aldosterona plasmáticos, metanefrinas, cortisol urinario y plasmático, función tiroidea, niveles de
drogas, angiografía renal, etc.
Exámenes para evaluar compromiso sistémico debido a hipertensión:
- Ecocardiograma con medición de grosor de la pared de ventrículo izquierdo.
- Medición de microalbuminuria en daño renal.
- Medición de la íntima de la arteria carótida.
- Fondo de ojo para evaluar retinopatía hipertensiva.
Manejo de hipertensión arterial
Pilares del tratamiento: Bajar de peso, dieta saludable hiposódica y ejercicio físico.
Este tratamiento debe empezarse en pacientes con presión arterial normal alta.
La decisión de iniciar tratamiento antihipertensivo depende del riesgo cardiovascular y del
compromiso renal, además, de los antecedentes de hiperlipidemia, hipertensión arterial familiar,
enfermedades cardiovasculares o diabetes mellitus.
En hipertensión arterial secundaria hay que empezar inmediatamente el tratamiento de la
enfermedad de base: Renal, cardiovascular, endocrinológica, otras.
Si la causa de hipertensión arterial es de origen renal usar antiproteinúricos ya que la proteinu-
ria persistente agrava el daño renal. Se ha comprobado que mantener el valor de presión arterial
entre percentil 50 y 75 disminuye la progresión de daño renal.
Medicamentos
- Diuréticos en hipertensión volumen dependiente
Furosemida: 0,5 a 2 mg/kg por dosis, 1 o 2 veces al día.
Hidroclorotiazida: 0,5 a 1 mg/kg al día una vez al día (recomendado en hipertensión asociado
a uso de corticoides).