Table of Contents Table of Contents
Previous Page  20 / 110 Next Page
Information
Show Menu
Previous Page 20 / 110 Next Page
Page Background

170

randomizados relevantes.

Para cada desenlace seleccionado, se evaluó

la certeza en la evidencia siguiendo la metodo-

logía GRADE

10

. Dos investigadores juzgaron

el riesgo de sesgo del conjunto de evidencia, la

inconsistencia entre los resultados de los estu-

dios individuales, la precisión de los estimadores

combinados en el meta-análisis, la aplicabilidad

de la evidencia encontrada a la pregunta y la pro-

babilidad de sesgo de publicación. En el caso de

los estudios

randomizados

incluidos en revisiones

sistemáticas se aceptó el juicio de riesgo de sesgo

para los estudios individuales de los autores de

la revisión. Para los estudios

randomizados

no

incluidos en revisiones sistemáticas, se evaluó

el riesgo de sesgo a nivel de cada desenlace

siguiendo los principios de la Cochrane Risk of

Bias Tool

11

.

Finalmente, los efectos relativos y absolutos

de las intervenciones, así como la evaluación de

la certeza de la evidencia se presentaron al panel

en una tabla de resumen de evidencia.

Revisión de la evidencia respecto de los valores

y preferencias

Para identificar estudios describiendo la im-

portancia relativa de los distintos desenlaces

seleccionados, así como de la valoración de los

pacientes de las distintas intervenciones, se con-

dujo una búsqueda de estudios observacionales

en MEDLINE y EMBASE (apéndice 1).

Determinación de la dirección y fuerza de la

recomendación

Para cada una de las preguntas, el panel determi-

nó en consenso la dirección y fuerza de la recomen-

dación siguiendo la metodología GRADE. Para ello

se elaboró una tabla de la Evidencia a la Decisión

utilizando el programa

GRADEpro Guideline De-

velopment Tool

(McMaster GRADE Center, Ha-

milton, Ontario, Canadá, 2016). Cada tabla resume

la evidencia disponible respecto de los efectos de la

intervención, la certeza en la evidencia, los valores y

preferencias de los pacientes, así como información

respecto a la accesibilidad, aceptabilidad e impacto

en la equidad de cada intervención. El panel decidió

no incluir evidencia de costos en la determinación

de la dirección y fuerza de la recomendación.

Como utilizar esta guía

Las recomendaciones fueron clasificadas como

“fuerte” o “condicional”. La Tabla 2 muestra la

interpretación correcta de los distintos grados de

recomendación.

Recomendaciones

1. ¿Se debe utilizar la consejería breve versus

no intervención en fumadores para la cesación

del consumo de tabaco?

Recomendación 1: Para todos los fuma-

dores, el panel recomienda usar consejería

Tabla 2. Interpretación de recomendaciones fuertes y condicionales

Recomendación Fuerte

Recomendación Condicional

Pacientes

Todos o casi todos los individuos

adecuadamente informados elegirían

la intervención propuesta

La mayoría de los individuos ade-

cuadamente informados elegirían la

intervención propuesta, sin embargo,

una proporción importante podría

decidir lo contrario

Clínicos

Todos o casi todos los individuos

debieran recibir la intervención

propuesta. Las decisiones de ayuda

suelen ser de escasa utilidad en este

contexto. El foco del clínico debiera

estar en superar las barreras para la

implementación de la intervención

propuesta

Es importante reconocer que eleccio-

nes diferentes pueden ser apropiadas

para individuos distintos. El foco del

clínico debiera estar en ayudar a cada

paciente a tomar decisiones concor-

dantes con sus valores y preferencias.

Las decisiones de ayuda suelen ser

muy útiles en este contexto

Políticas de Salud

La recomendación puede ser adoptada

como política de salud en todos o casi

todos los casos.

Este tipo de recomendaciones son un

buen sustrato para elaborar medidas

de desempeño

La elaboración de una política de

salud requeriría de un debate extenso

con los distintos actores relevantes

Grupo FENIX

Rev Chil Enferm Respir 2017; 33: 167-175