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Lactancia materna en hospitalizados
Rosa M. Antilef H.
CAPÍTULO 21
Existen cada vez más evidencias que el tipo de alimentación durante los primeros 1.000 días
de vida, es decisivo sobre el crecimiento del niño y su salud en el futuro. La lactancia materna
tiene un rol fundamental en este período y es así como la OMS lo recomienda y promueve como
la forma exclusiva de alimentación hasta los 6 meses y complementaria hasta los 2 años.
Una serie de necesidades del niño pueden ser vulneradas durante la hospitalización: aspectos
afectivos por la separación materna, miedo, angustia por la incomprensión de las rutinas hos-
pitalarias, y la suspensión de la lactancia materna. La mayoría de los factores y procedimientos
hospitalarios pueden poner en riesgo la mantención de la lactancia, entre otros la separación del
niño de su madre ya es un factor que influirá en la producción de leche materna, esto significa
estrés para la madre, preocupación, miedo por estado de salud de su hijo, la falta de succión del
lactante produce congestión mamaria o falta de estímulo para mantener su producción. En el
niño influirá, además, la introducción temprana de chupete, la administración de suplementos
artificiales, sueros, horarios rígidos de alimentación, extracción poco frecuente de leche, etc.
Beneficios de mantener la lactancia materna durante la hospitalización
- Reducción en el número de días de hospitalización y números de eventos del mismo.
- Menor estrés del niño y la madre.
- Disminución del dolor.
- Menor gasto energético del niño hospitalizado (menor estrés, mejor termorregulación).
- Disminuye la mortalidad en los niños de pretérmino.
- Fortalece la inmunidad en una situación de especial vulnerabilidad.
- Mayor satisfacción usuaria.
Estrategias que favorecen la lactancia durante la hospitalización
Tener éxito en la mantención de la lactancia durante la hospitalización requiere de la par-
ticipación de todo el equipo de salud, incluyendo al personal administrativo ya que basta que
uno o unos fallen, para desincentivar a la nodriza a que amamante a su hijo, esto por el especial
momento de vulnerabilidad que padece.
Las siguientes son algunas de las estrategias que pueden aplicarse en los servicios clínicos:
- En la anamnesis del ingreso consultar sobre el estado de lactancia, información que permitirá
guiarnos sobre su alimentación.
- Incentivar el alojamiento conjunto.
- Fomentar el contacto cercano y directo de la diada.
- Fomentar lactancia materna libre demanda.
- Permitir el amamantamiento directo salvo que exista una causa médica para su contraindica-
ción.
- Si es necesario el uso de la mamadera escoger aquella que interfiera lo menos posible en la
lactancia sonda al dedo, cucharita, vasito.
- Idealmente contar con extractores de leche cerrados o 100% esterilizables para aquellas ma-
dres que no pueden dar leche en forma directa.
- No juzgar a las madres y niños que prolongan su lactancia.
- Responsabilidad de la institución mantener al personal de salud capacitado y actualizado en
el tema.
- Facilitar la extracción de leche materna en los casos en que no es posible ingerir por vía oral.