Estudio TROPHY
Candesartan previene la hipertensión y sus complicaciones
La prehipertensión es considerada como una condición precursora de la hipertensión etapa 1, y se relaciona con elevadas tasas de morbilidad y muerte por causas cardiovasculares. Además, se han establecido asociaciones con otros factores de riesgo cardiovasculares. El estudio TROPHY (siglas en inglés de Trial of Preventing Hypertension) ha analizado el tratamiento incipiente de la prehipertensión, definida como la presión sistólica de 130 a 139 mmHg y presión diastólica de 89 mmHg o menor (o presión sistólica de 139 mmHg o más baja con presión diastólica de 85 a 89 mmHg), para prevenir o retrasar el desarrollo de la enfermedad. Los investigadores justificaron la intervención farmacológica mediante un bloqueador del receptor de angiotensina en base a tres argumentos. Primero, en la prehipertensión, la presión arterial sigue siendo un potente predictor de acontecimientos cardiovasculares, sugiriendo que disminuirla puede ser beneficioso. La transición de prehipertensión a hipertensión refleja, en parte, cambios tales como hipertrofia arteriolar y disfunción endotelial. En segundo lugar, los factores de crecimiento mediados por la estimulación del sistema nervioso simpático y el exceso de actividad del sistema renina-angiotensina tienden a promover la hipertrofia vascular así como también los efectos hemodinámicos. Igualmente se han descrito en la prehipertensión aumentos de las concentraciones plasmáticas de la norepinefrina y de la renina. Tercero, las actuales guías clínicas recomiendan que la prehipertensión sea tratada con cambios en la formas de vida, como pérdida de peso, restricción de sal, ejercicio y modificaciones alimenticias.
Sin embargo, a pesar de los intensos esfuerzos para promover saludables estilos de vida, el predominio de la prehipertensión está en aumento. En ausencia de evidencia sobre la eficacia a largo plazo de los anteriores acercamientos, el estudio TROPHY determinó la seguridad, la tolerabilidad y la eficacia de una intervención farmacológica temprana en individuos prehipertensos. Participantes con presión sistólica de 130 a 139 mmHg y diastólica de 89 mmHg o menor, o presión sistólica de 139 mmHg o menor y presión diastólica de 85 a 89 mmHg, fueron asignados para recibir durante dos años candesartan o placebo, seguido de dos años de placebo para todos.
Un total de 809 participantes fueron aleatorizados (409 a candesarta y 400 a placebo). Se obtuvieron datos para el análisis de 772 personas (391 del grupo candesartan y 381 del grupo control; con 48.5 años de edad promedio y 59.6% hombres). Durante los primeros dos años, la hipertensión se desarrolló en 154 pacientes del grupo placebo y en 53 del grupo de intervención con candesartan (reducción del riesgo relativo, 66.3 por ciento; P < 0.001). Después de cuatro años, la hipertensión apareció en 240 participantes del grupo sin fármaco y en 208 del grupo candesartan (reducción del riesgo relativo, 15.6 por ciento; P < 0.007). Eventos adversos serios ocurrieron en el 3.5% de los participantes con candesartan y en el 5.9% con placebo.
En conclusión, en cuatro años de evaluación, casi dos tercios de los pacientes con prehipertensión no tratada (grupo placebo) desarrollaron hipertensión estado 1. El manejo de la prehipertensión con candesartan fue bien tolerado y redujo el riesgo de hipertensión durante el período de estudio. Así, el tratamiento de la prehipertensión parece ser muy factible y beneficioso.
Fuente bibliográfica
N Engl J Med. 2006 Mar 14;