Neurología
Mitoxantrona reduce las recaídas de la neuromielitis óptica
La neuromielitis óptica (NMO) es una rara enfermedad inflamatoria del sistema nervioso central que se caracteriza por neuritis óptica y mielitis transversa con extenso compromiso longitudinal. El descubrimiento de un autoanticuerpo específico contra la acuaporina 4 en individuos NMO ha dado lugar a un marcado aumento en la comprensión de los mecanismos autoinmunes y sugiere un rol de la autoinmunidad mediada por células B. Hasta un 80% de las personas con NMO típica tienen IgG NMO o anticuerpos anti-acuaporina 4 en su suero, y este anticuerpo está implicado en la patogénesis de la enfermedad. Además, la baja eficacia del interferón beta en la prevención de recaídas y la sobre-regulación del factor de activación de las células B en pacientes con NMO apoya el papel de la autoinmunidad de las células B.
Ho Jin Kim y colegas (Instituto de Investigación y Hospital del Centro Nacional del Cáncer, Goyang, Corea del Sur), evaluaron la eficacia y seguridad del clorhidrato de mitoxantrona, y además, determinaron cómo el medicamento presenta su efecto inhibitorio sobre las células B en 20 pacientes con recaídas de neuromielitis óptica. Se aplicaron infusiones de mitoxantrona hasta una dosis máxima acumulativa de 120 mg/m2. Las principales medidas de resultado correspondieron a la tasa anual de recaídas, valores de la escala expandida del estado de discapacidad y la fracción de células CD27+CD19.
Durante el tratamiento con mitoxantrona, la tasa media anual de recaídas se redujo en un 75%, y un 50% de los pacientes estuvieron libre de recidiva. La discapacidad mejoró o se estabilizó en todos los individuos. Ningún paciente tuvo efectos adversos graves durante un seguimiento medio de 41 meses después de completar la terapia. El análisis de citometría de flujo de los marcadores de superficie celular reveló que el esquema terapéutico preferentemente afectó a las células CD27+CD19.
Se concluye que el tratamiento con mitoxantrona en pacientes con neuromielitis óptica altamente recidivante reduce significativamente las tasas de recaída, lo que resulta en la posterior estabilización funcional o mejora.
Fuente bibliográfica
Arch Neurol. Published 2010. doi:10.1001/archneurol.2010.322
