Oftalmología
Condiciones oculares y sistémicas son más frecuentes en la blefaritis
El desarrollo de la blefaritis responde procesos multifactoriales, incluyendo la dieta, infecciones, aspectos psicológicos, enfermedades de la piel, condiciones hormonales y enfermedades inflamatorias locales y sistémicas.
La blefaritis es una de las condiciones más comunes que se observa en la práctica oftalmológica. Un reciente estudio norteamericano basado en la población confirmó su alta prevalencia. Los oftalmólogos y optometristas informan que se presenta en la práctica clínica en el 37% y 47% de sus pacientes, respectivamente, y existe un amplio acuerdo en que la disfunción de las glándulas de Meibomio es la causa más común del ojo seco evaporativo. La blefaritis puede afectar la apariencia física de las personas, comodidad, función visual y las interacciones sociales. Los síntomas asociados (corteza o escamas en las pestañas, párpados pegados y/o rojos al despertar) también son relativamente comunes y, a menudo se describen de manera conjunta.
Oftalmólogos del Centro Médico Meir, en Kfar Sava, Israel, evaluaron la prevalencia de enfermedades sistémicas en pacientes con blefaritis, mediante un estudio observacional retrospectivo de casos y controles, que consideró a 16.706 enfermos y 16.706 controles seleccionados al azar. Finalmente, se realizó un análisis de prevalencia para diversas enfermedades oculares y sistémicas, factores de riesgo, edad, género, estado civil, país de origen, lugar de residencia y nivel socioeconómico.
Demográficamente, se encontró una tendencia significativamente mayor de desarrollar blefaritis en las poblaciones de menor nivel socioeconómico, en poblaciones que viven en las zonas urbanas y en judíos Ashkenazi, observándose una asociación significativa.
En conclusión, algunas condiciones oculares y sistémicas son más frecuentes entre los pacientes con blefaritis. Una mejor comprensión de la relación fisiopatológica de tales enfermedades puede ayudar al tratamiento y prevención de la blefaritis.
