Gastroenterología
Ondansetron en pediatría reduce los vómitos y facilita la rehidratación
En los Estados Unidos, la gastroenteritis provoca anualmente más de 1.5 millones de visitas pediátricas y 200.000 hospitalizaciones. Aunque se recomienda la terapia de rehidratación oral para los niños con deshidratación suave a moderada, sigue siendo poco utilizada. Los clínicos que proporcionan los cuidados médicos en las urgencias prefieren elegir la hidratación intravenosa que la oral cuando los vómitos son el síntoma más importante. En una encuesta de salud, el 36 por ciento de los pediatras reportaron que el vomitar era una contraindicación a la rehidratación oral. En el estudio más significativo sobre este tema en niños, ondansetron oral o placebo fueron administrados durante 48 horas. Si bien, el vómito se redujo entre los niños que recibieron el ondansetron, los índices de regreso y de visitas por diarrea a las unidades de emergencia aumentaron.
Pediatras del Hospital de Enfermedades Infantiles de la Universidad de Toronto (Canadá), realizaron una nueva investigación para determinar si la administración de una sola tableta de ondansetron en niños con vómitos y deshidratación por gastroenteritis controlaría los eventos con mínimos efectos secundarios. Incorporaron al estudio 215 niños entre 6 meses y 10 años de edad que estaban siendo tratados en un servicio de urgencias pediátricas por gastroenteritis y deshidratación. Tras su asignación aleatoria a un tratamiento por vía oral con comprimidos dispersables de ondansetron o de placebo, los niños recibieron una terapia de rehidratación oral según un protocolo estandarizado.
En comparación con los niños que recibieron el placebo, los tratados con ondansetron tenían menos probabilidades de presentar vómitos (14% frente al 35%; riesgo relativo: 0,40; intervalo de confianza del 95%: 0,26 a 0,61), vomitaron con menos frecuencia (número medio de episodios por niño: 0,18 frente a 0,65; P < 0,001), su ingesta oral fue mayor (239 ml frente a 196 ml; P = 0,001) y tenían menos probabilidades de precisar rehidratación intravenosa (el 14% frente al 31%; riesgo relativo: 0,46; IC del 95%: 0,26 a 0,79). Aunque la duración media de estadía en el servicio de urgencias se redujo en un 12% en el grupo tratado con ondansetron, en comparación con placebo (P = 0,02), las tasas de hospitalización (el 4% y el 5%, respectivamente; P = 1,00) y de repetición de las visitas al servicio de urgencias (el 19% y el 22%, P = 0,73) no difirieron de forma significativa entre los grupos.
En conclusión, los niños con gastroenteritis y deshidratación, el tratamiento con una sola dosis oral de ondansetron reduce los vómitos y facilita la rehidratación oral y podría, por tanto, ser adecuado para su uso en los servicios de urgencias.
Fuente bibliográfica
N Engl J Med. 2006 Apr 20;354(16):1698-705