Salud Pública
Actividad física juvenil potencia la salud cardiovascular en la adultez
Estos datos señalan que el trabajo físico en niños y adultos es potencialmente beneficioso para la salud cardiovascular futura, ya que promueve una mayor elasticidad de la arteria carótida.
La disminución de la elasticidad arterial es un factor de riesgo para varios resultados cardiovasculares. Lamentablemente, son limitados los datos longitudinales respecto al efecto de la actividad física en la juventud sobre la elasticidad arterial de adultos.
El objetivo de este estudio realizado por Kristiina S. Pälve y colaboradores (Universidad de Turku, en Finlandia) fue determinar los efectos a largo plazo de la actividad física en niños y adultos jóvenes sobre la elasticidad de la arteria carótida después de 21 años de seguimiento. Se incluyeron 1.417 niños (de 9 a 15 años de edad) y 999 adultos jóvenes (de 18 a 24 años), a quienes se les aplicó un cuestionario de tiempo de actividad física a partir de 1986 y registrado sus índices de ultrasonido derivados de la elasticidad de la arteria carótida medidos en 2007. Estos índices fueron la distensibilidad (%/10 mm Hg), el módulo de elasticidad de Young (kPa) y el índice de rigidez (sin unidades).
La actividad física entre los 18 y 24 años se asoció directamente con la distensibilidad (β = 0,068, P = 0,014) e inversamente con el módulo de elasticidad de Young (β = -0,057, P = 0,0037) e indirectamente con el índice de rigidez (β = -0.050, P = 0,0028) 21 años más tarde en hombres y mujeres. Las asociaciones se mantuvieron después de ajustar por edad, género, índice de masa corporal, tabaquismo, presión arterial sistólica, lípidos séricos e insulina, y los cambios de actividad después de 21 años. Entre los 9 y 15 años, la relación favorable se mantuvo en los hombres (distensibilidad [β = 0,097, P = 0,010], módulo de elasticidad de Young [β = -0,060, p = 0,028] y el índice de rigidez [β = -0,062, P = 0,007]), pero no en las mujeres (P = 0,70, P = 0,85 y P = 0,91, respectivamente).
En conclusión, la actividad física en niños y adultos jóvenes se asocia con una mayor elasticidad de la arteria carótida en el futuro, lo que sugiere que niveles más altos de ejercicios en los jóvenes pueden beneficiar la salud cardiovascular futura.
