JAMA
Actualizaciones en el manejo integral de la diabetes tipo 2 en adultos
En esta revisión se abordan los factores de riesgo, los criterios de diagnóstico y las opciones terapéuticas más recientes, con el objetivo de prevenir complicaciones y mejorar la calidad de vida de los pacientes.
La diabetes tipo 2 (DM2) representa un desafío de salud pública, afectando a un porcentaje significativo de la población mundial y asociándose con complicaciones a largo plazo que incluyen enfermedades cardiovasculares, insuficiencia renal, pérdida de visión y aumento de la mortalidad. Su manejo efectivo requiere un enfoque integral que combine modificaciones en el estilo de vida y farmacoterapia para alcanzar y mantener los objetivos glucémicos.
La presente revisión, liderada por la Dra. Rita Kalyani de la Facultad de Medicina de la Universidad Johns Hopkins en Baltimore, EE. UU., tuvo como objetivo resumir la evidencia actual sobre el diagnóstico y tratamiento de la DM2 en adultos, con el fin de proporcionar una guía actualizada para los profesionales de la salud.
Se realizó una búsqueda exhaustiva en PubMed de artículos publicados en los últimos cinco años hasta febrero de 2025. La selección se centró en estudios de alta calidad, incluyendo ensayos clínicos aleatorizados, estudios observacionales, revisiones sistemáticas, metaanálisis y guías de práctica clínica. Se identificaron 126 artículos relevantes de un total de 2.016, que fueron analizados para extraer información clave sobre el diagnóstico y tratamiento de la DM2.
La revisión subraya varios puntos importantes para la práctica clínica. Entre los factores de riesgo se encuentran la edad, los antecedentes familiares, la obesidad y la falta de actividad física. El diagnóstico se determina mediante una glucosa plasmática en ayunas de al menos 126 mg/dL, una HbA1c ≥6,5% o una glucemia a las 2 horas en la prueba de tolerancia oral a la glucosa ≥200 mg/dL. La actividad física puede disminuir la HbA1c en un rango de 0,4% a 1%. Las estrategias intensivas de control glucémico logran reducir las complicaciones microvasculares en un 3,5%, el riesgo de infarto de miocardio entre un 3,3% y un 6,2%, y la mortalidad de un 2,7% a un 4,9%. Aproximadamente un tercio de los pacientes necesitará tratamiento con insulina.
Los fármacos de primera línea incluyen la metformina. Además, los inhibidores del cotransportador de sodio-glucosa tipo 2 (iSGLT2) y los agonistas del receptor del péptido similar al glucagón tipo 1 (GLP-1RA) ofrecen beneficios significativos en la reducción del riesgo de enfermedades cardiovasculares (12%-26%), insuficiencia cardíaca (18%-25%) y enfermedad renal (24%-39%). Los GLP-1RA de alta potencia y los agonistas duales de GIP/GLP-1 pueden lograr una pérdida de peso superior al 5%, e incluso al 10%. La elección del medicamento se personaliza según las comorbilidades del paciente, el riesgo de hipoglucemia, el peso y el costo. La monitorización glucémica, que incluye el uso de dispositivos de monitoreo continuo de glucosa (MCG), es fundamental para optimizar el control de la glucosa y prevenir complicaciones.
En resumen, la diabetes tipo 2 afecta hasta el 14% de la población mundial y está relacionada con complicaciones que, en muchas ocasiones, pueden prevenirse. Además de los cambios en el estilo de vida, la metformina suele ser la opción inicial para lograr los objetivos de HbA1c. Para quienes tienen enfermedad cardiovascular, renal o un alto riesgo de padecerlas, las guías recomiendan el tratamiento temprano con iSGLT2 y GLP-1RA, ya sea individualmente o en combinación.
Fuente bibliográfica
Diagnosis and Treatment of Type 2 Diabetes in Adults A Review
Kalyani RR, et al.
DOI: 10.1001/jama.2025.5956
