Oftalmología
Consumo prolongado de aspirina tiene mayor riesgo de DMAE
Según este estudio prospectivo poblacional de 15 años, el uso regular del medicamento puede duplicar el peligro de degeneración macular asociada a la edad tipo neovascular. Estos hallazgos parecen ser independientes de las enfermedades cardiovasculares, el tabaquismo y otros factores de riesgo.
La aspirina es uno de los medicamentos más utilizados en el mundo, con más de 100 billones de comprimidos consumidos cada año. Sus beneficios en la prevención secundaria de la enfermedad cardiovascular recurrente, tales como el infarto de miocardio y el accidente cerebrovascular isquémico, están bien establecidos y supera al riesgo de hemorragia gastrointestinal e intracraneal. También se usa ampliamente para la prevención primaria de la enfermedad cardiovascular, aunque su valor en individuos de bajo riesgo es menos concreto y ha sido cuestionado. Recientemente, se han acumulado pruebas de que también podría reducir la incidencia de cáncer y la mortalidad relacionada con el cáncer.
Gerald Liew y colegas (Departamento de Oftalmología de la Universidad de Sydney, en Australia) determinaron si el uso regular de aspirina se asociaría a un mayor peligro de degeneración macular asociada a la edad (DMAE), mediante el uso de datos analizados a partir de una cohorte prospectiva de 15 años. Los participantes completaron un cuestionario detallado para evaluar el uso de aspirina, estado de la enfermedad cardiovascular y factores de riesgo para la DMAE. La condición oftalmológica se calificó de lado a lado por fotografías de la retina tomadas en cada visita y así evaluar la incidencia de DMAE neovascular (exudativa) y de atrofia geográfica (DMAE seca) de acuerdo con la clasificación internacional.
De los 2389 participantes con datos disponibles de seguimiento, 257 (10,8%) eran usuarios regulares de aspirina y 63 de ellos (24,5%) desarrollaron DMAE neovascular. Los usuarios regulares eran más propensos a tener DMAE neovascular: la incidencia acumulada a 15 años era del 9,3% en usuarios y 3,7% en no usuarios. Tras ajustar por edad, género, tabaquismo, enfermedad cardiovascular, presión arterial sistólica e índice de masa corporal, las personas regularmente usuarias de aspirina tenían un riesgo más alto de DMAE neovascular (riesgo [R], 2,46, IC del 95%, 1,25 a 4,83). La asociación mostró un efecto dosis-respuesta (multivariado/ajustado P = 0,01 para la tendencia). El uso de aspirina no se ligó a una incidencia de atrofia geográfica (R multivariado/ajustado, 0,99, IC del 95%, 0,59 a 1,65).
En conclusión, el uso habitual de aspirina se asocia con un mayor riesgo de degeneración macular relacionada con la edad de tipo neovascular, independiente de una historia de enfermedad cardiovascular y tabaquismo.
