Salud Pública
Contaminación del aire eleva los accidentes cerebrovasculares
Esta relación se observó principalmente en países de ingresos bajos y medios, sugiriendo la necesidad de políticas que puedan reducir la exposición personal a la polución del aire, especialmente en regiones altamente contaminadas.
La contaminación atmosférica es un factor de riesgo importante para las enfermedades cardiovasculares en todo el mundo, siendo la contaminación en suspensión responsable de más de tres millones de muertes cada año. Se sabe que los aumentos en las concentraciones contaminantes del aire están asociados al infarto agudo de miocardio y al ingreso hospitalario o a muerte por insuficiencia cardíaca.
Mediante una revisión sistemática y meta-análisis de estudios observacionales, especialistas de la Universidad de Edimburgo, en el Reino Unido, revisaron la evidencia a corto plazo de la contaminación atmosférica, el ingreso hospitalario y los accidentes cerebrovasculares. Los autores seleccionaron estudios en diversas bases de datos que habían considerado aumentos diarios de gases contaminantes (monóxido de carbono, dióxido de azufre, dióxido de nitrógeno y ozono) y de partículas (<2,5 micras o <10 micras de diámetro (PM2. 5 y PM10)).
De 2.748 artículos, 238 fueron revisados en profundidad, 103 cumplían los criterios de inclusión y 94 contribuyeron a meta-estimaciones. Esto proporcionó un total de 6,2 millones de eventos en 28 países. La estadía hospitalaria para el accidente cerebrovascular o mortalidad por accidente cerebrovascular se ligó a un aumento en las concentraciones de monóxido de carbono (riesgo relativo 1,015 por 1 ppm, intervalo de confianza del 95%: 1,004 - 1,026), dióxido de azufre (1,019 por 10 ppb, 1,011 - 1,027) y dióxido de nitrógeno (1,014 por cada 10 ppb, 1,009 - 1,019). El incremento de la concentración de PM10 y PM2.5 también se vinculó a la hospitalización y mortalidad (1,011 por cada 10 ug/m3 (1,011 a 1,012) y 1,003 por cada 10 ug/m3 (1,002 a 1,004), respectivamente). La asociación más débil se observó con el ozono (1,001 por cada 10 ppb, 1,000 - 1,002). Vínculos más fuertes y efectos más persistentes se detectaron con PM2.5.
En conclusión, los contaminantes de gases y partículas tienen una marcada y estrecha relación temporal con ingresos hospitalarios por ictus o mortalidad por accidente cerebrovascular. Políticas de salud pública y ambientales para reducir la contaminación del aire podrían reducir la carga de tales condiciones.
