JAMA Cardiology
Fumar y consumir cannabis se asocian con disfunción endotelial
La exposición crónica a esta droga, reduce significativamente la capacidad de los vasos sanguíneos para dilatarse, similar a los efectos del tabaco en la salud vascular.
Se suele creer que el humo del cannabis es inofensivo; sin embargo, contiene muchas de las sustancias químicas presentes en el del tabaco, además de partículas finas que contribuyen a la morbilidad y mortalidad cardiovascular. Debido al incremento en su consumo, surgen preocupaciones para la salud pública. En este contexto, la salud vascular puede evaluarse mediante la medición de la dilatación mediada por flujo arterial (FMD), un indicador de la función endotelial y un predictor de enfermedad vascular.
El objetivo de esta investigación, liderada por el Dr. Matthew Springer de la División de Cardiología de la Universidad de California, San Francisco, EE. UU., fue determinar si el consumo crónico de cannabis, tanto de forma inhalada como mediante el uso de comestibles con tetrahidrocannabinol (THC), se relaciona con la disfunción endotelial en adultos jóvenes y saludables.
Se realizó un estudio transversal con 55 adultos sanos de entre 18 y 50 años, reclutados entre octubre de 2021 y agosto de 2024. Estos se dividieron en tres grupos: fumadores habituales (al menos 3 sesiones semanales durante más de un año), usuarios de comestibles con THC (consumiendo al menos 3 productos por semana durante más de un año) y no consumidores. Se midieron la FMD y la velocidad de la onda de pulso (PWV). Además, se expusieron células endoteliales de vena umbilical humana al suero de los participantes, con y sin el factor de crecimiento endotelial vascular (VEGF), para evaluar cómo influye el suero en la producción de óxido nítrico endotelial.
Los resultados mostraron que la capacidad de los vasos sanguíneos para dilatarse, medida por la FMD, fue significativamente menor en los usuarios de cannabis, tanto en quienes fumaban (6%) como en los que consumían comestibles con THC (4,6%), en comparación con los no usuarios (10,4%).
Además, en las células endoteliales expuestas al suero de estos consumidores, la producción de óxido nítrico estimulada por VEGF fue menor en los fumadores (1,1 nmol/L) en comparación con los no consumidores (1,5 nmol/L). Se encontró además una correlación significativa entre el consumo y el deterioro de la función vascular: cuanto mayor era la frecuencia del consumo de cannabis por inhalación y la ingesta de THC, menor era la capacidad de dilatación.
En conclusión, fumar cannabis de forma crónica y el consumo de comestibles con THC están asociados con disfunción endotelial, similar a la observada en los fumadores de tabaco, aunque aparentemente a través de mecanismos distintos. Este hallazgo subraya la necesidad de comprender mejor los riesgos potenciales para la salud vascular asociados al consumo de esta droga.
Fuente bibliográfica
Association of Endothelial Dysfunction With Chronic Marijuana Smoking and THC-Edible Use
Mohammadi L, et al.
DOI: 10.1001/jamacardio.2025.1399
