Pediatría
La cotinina predice reingresos por crisis asmática
Los autores encontraron que el metabolito de la nicotina detectado en suero y saliva es común entre los niños atendidos por asma y se asocia con la readmisión hospitalaria. Este hallazgo puede alertar sobre la atención clínica de los pequeños con mayor riesgo de morbilidad asmática.
En niños, el asma representa un problema significativo, tanto en términos de aumento de las tasas de gasto en atención de salud como en el impacto económico de los días de ausentismo escolar y laboral. Existen pruebas que la exposición al tabaco tiene un efecto perjudicial sobre el flujo del aire y la capacidad de respuesta de las vías respiratorias en los niños, conduciendo a un mal control del asma.
Un equipo dirigido por Robert Kahn, del Hospital Infantil de Cincinnati, en Estados Unidos, exploraron la relación entre la exposición al humo de tabaco (reportado con un biomarcador) y las tasas de reingreso por crisis asmática. Se incluyeron 774 niños de 1 a 16 años ingresados por asma o sibilancias. El resultado primario fue al menos 1 ingreso por asma o sibilancias dentro del año. Los médicos informaban de cualquier exposición al tabaco en el hogar, en una segunda residencia o en el automóvil. Se midieron los niveles de cotinina en suero y saliva con espectrometría de masas, y una regresión logística evaluó las asociaciones entre la exposición al tabaco y los reingresos.
Un total de 619 niños tenían datos sobre exposición al tabaco, el 57% era afroamericano y el 76% tenía seguro médico. Diecisiete por ciento de ellos habían sido readmitidos al año. Las tasas de exposición al tabaco eran 35,1%, 56,1% y 79,6% en los informes y según medidas de suero y de saliva, respectivamente. Los reportes médicos sobre exposición al tabaco no se asociaron a la readmisión (riesgo ajustado: 1,18, 95% intervalo de confianza: 0,79 a 1,89), pero tener cotinina detectable en suero o saliva se ligaba a mayores probabilidades de readmisión (riesgo ajustado [intervalo de confianza del 95%]: 1,59 [1,02-2,48] y 2,35 [1,22 a 4,55], respectivamente). Entre los niños cuyos profesionales no informaban de la exposición al tabaco, el 39,1% tenía cotinina sérica detectable y 69,9% en saliva. De los niños con exposición registrada, el 87,6% presentaba cotinina sérica detectable y el 97,7% cotinina en saliva.
En conclusión, niveles detectables de cotinina en suero y saliva son frecuentes en niños ingresados por asma y se suelen asociar con la readmisión, considerando que el informe médico de la exposición al tabaco no lo era.
