Cardiología
La depresión incrementa la enfermedad coronaria en mujeres
Estos hallazgos subrayan la necesidad de realizar más investigación sobre la condición coronaria y los factores psicosociales, en particular la depresión, en las mujeres jóvenes, que a menudo están poco representadas en los estudios clínicos respectivos.
Las mujeres jóvenes con enfermedad coronaria tienen altas tasas de depresión y un mayor riesgo de eventos adversos en comparación a los varones de similar edad. Se desconoce si la depresión tiene un valor pronóstico en este grupo respecto a los hombres y mujeres de más edad.
El objetivo de este estudio (Departamento de Epidemiología de la Facultad de Salud Pública de la Universidad de Emory, en Estados Unidos) fue evaluar si la depresión en mujeres jóvenes se asociaría con un mayor riesgo de enfermedad arterial coronaria (EAC) y a resultados adversos en comparación a hombres de igual edad y mujeres mayores. Se analizaron 3.237 pacientes sometidos a angiografía coronaria para la evaluación de la EAC y se siguieron 2,9 años (mediana). Los síntomas depresivos fueron evaluados con el Cuestionario de Salud del Paciente (PHQ)-9, y la carga de EAC se dividió en función de su presencia o ausencia.
Tras el ajuste multivariable para los factores de riesgo de la EAC, los síntomas depresivos predijeron la enfermedad coronaria en mujeres ≤ 55 años (riesgo = 1,07 intervalo de confianza del 95% [IC]: 1,2 a 1,3 por 1 punto de incremento en el PHQ-9), y no en los hombres ≤ 55 años o mujeres > 55 años. Los síntomas depresivos también predijeron un mayor riesgo de muerte en mujeres ≤ 55 años (riesgo = 1,07, IC del 95%: 1,02 a 1,14; 1 punto por cada aumento de PHQ-9 score), pero no en los varones ≤ 55 años y mujeres mayores de 55 años, con P = 0,02 para la interacción depresión-sexo y P = 0,02 para la interacción sexo-edad-depresión.
En conclusión, en pacientes con sospecha o enfermedad arterial coronaria establecida, los síntomas depresivos se asocian a un mayor peligro de muerte, sobre todo en las mujeres jóvenes. Este grupo puede ser especialmente vulnerable a los efectos cardiovasculares adversos de la depresión.
