Oftalmología
Nivel educativo influencia el desarrollo de la miopía
Este gran estudio europeo de base poblacional proporciona una fuerte evidencia de la relación entre la prevalencia y la magnitud de la miopía y los niveles de educación escolar y formación profesional.
La miopía es un trastorno complejo con gran impacto médico en los individuos afectados y con una considerable carga económica para la sociedad. La condición severa es causa importante de discapacidad visual en todo el mundo debido a las comorbilidades oculares, como el desprendimiento de retina regmatógeno, la degeneración macular miópica, cataratas prematuras y el glaucoma.
Alireza Mirshahi y colegas (Departamento de Oftalmología de la Universidad del Centro Médico de Mainz, Mainz, Alemania) analizaron el vínculo entre la miopía y el nivel educativo en una cohorte del Estudio de Salud de Gutenberg, que incluía a 4.685 personas entre 35 y 74 años de edad. Se aplicó un protocolo estandarizado con un extenso cuestionario oftalmológico, exámenes generales, cardiovasculares y psicológicos; y pruebas de laboratorio, incluidos los análisis genéticos. Además, se documentaron los niveles de logro en la educación escolar y la formación profesional. El equivalente esférico se determinó por autorrefractometría sin cicloplejía y se ajustaron los modelos lineales mixtos mediante la edad, género y 45 polimorfismos de nucleótido único (SNP) ligadosa la miopía como covariables.
Las personas que se graduaron de la escuela después de 13 años eran más miopes (mediana, -0,5 dioptrías [D]; primer cuartil [Q1]/tercer cuartil [Q3], -2,1/0,3 D) que los que se titularon a los 10 años (mediana, -0,2 D; Q1/Q3, -1,3/0,8 D), que los que se graduaron después de 9 años (mediana, 0,3 D; Q1/Q3, -0,6/1,4 D), y que los que nunca terminaron la escuela secundaria (mediana, 0,2 D; Q1/Q3, -0,5/1,8 D, P <0,001, respectivamente). Lo mismo se observó en personas con título universitario (mediana, -0,6 D; Q1/Q3, -2,3/0,3 D) frente a los que sólo acabaron la secundaria (mediana, 0 D; Q1/Q3, -1,1/0,8 D) o la escuela vocacional primaria (mediana, 0 D; Q1/Q3, -0,9/1,1 D) frente a personas sin cualificación profesional (mediana, 0,6 D; Q1/Q3, -0,4/1,7 D, P <0,001, respectivamente). De las que se graduaron de la escuela después de 13 años, el 60,3% era miopes (SE, ≤ -0,5 D) frente al 41,6%, 27,2% y 26,9% a los 10 años, a los que se graduaron después de 9 años, y a los que nunca se graduaron de la escuela secundaria, respectivamente (P <0,001). En los graduados universitarios, la proporción de individuos con miopía fue mayor (53%) en comparación los que se graduaron de la secundaria (34,7%) o primaria (34,6%) y centros de formación profesional versus aquellos sin ningún tipo de formación profesional (23,9%, P <0,001, respectivamente). En el análisis multivariado: la escuela superior y los niveles profesionales de educación se ligaron a un mayor equivalente esférico miope independiente del género. El efecto de la edad y los SNP era pequeño.
En conclusión, niveles más altos de educación escolar y profesional se asocian a una refracción más miope. Los participantes con logros de educación superior tenían más miopía que las personas con menos educación.
