Epidemiología
Polución aumenta la presencia de ansiedad
Este estudio sugiere que una elevada exposición a partículas en suspensión de menos de 2,5 micras, se relacionaría a un mayor riesgo de síntomas de ansiedad en la población.
Los trastornos de ansiedad, caracterizados por el miedo perturbador, preocupaciones y trastornos conductuales, como la evitación o sensaciones físicas de hiperexcitación, son el tipo más común de trastornos psiquiátricos en la población general. A nivel mundial, aproximadamente el 16% de las personas padecerá un trastorno ansioso en su vida y el 11% lo habrá experimentado en el año. Dada la importante carga personal y social de la ansiedad y el problema de la resistencia al tratamiento, es imprescindible identificar los factores de riesgo modificables para la condición, así como su sintomatología.
Mediante un estudio de cohorte observacional, epidemiólogos de la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Harvard, Boston, Estados Unidos, determinaron si una mayor exposición a la contaminación atmosférica se asociaría a síntomas frecuentes de ansiedad. Se consideraron 71.271 mujeres con estimaciones válidas sobre la exposición durante al menos un período de exposición de interés y datos sobre los síntomas de ansiedad.
Las mujeres tenían entre 57 y 85 años (media: 70 años) de edad en el momento de la evaluación de la sintomatología ansiosa, con una prevalencia del 15%. La exposición se caracterizó mediante una estimación media de exposición a material particulado <2.5 micras de diámetro (PM2.5) y 2,5 a 10 micras de diámetro (PM2.5-10) en un mes, tres meses, seis meses, un año y 15 años antes de la evaluación de la sintomatología. Se observó un aumento significativo de los síntomas de ansiedad con una mayor exposición a PM2.5 en los períodos de medición (por ejemplo, riesgo por cada 10 mg/m3 de aumento en PM2.5 al mes: 1,12, IC del 95%: 1,6 a 1,19; a 12 meses: 1,15, 1,06 a 1,26). Los modelos que incluyeron múltiples ventanas de exposición con períodos a corto plazo fueron más relevantes que los de largo plazo. No hubo un vínculo entre la ansiedad y la exposición a PM2.5-10. La proximidad residencial a las principales carreteras no estuvo relacionada con los síntomas de ansiedad de forma dependiente de la dosis.
En conclusión, la exposición a las partículas finas (PM2.5) se asoció con altos síntomas de ansiedad, con las exposiciones recientes más relevantes que las más distantes. Se recomienda evaluar si las reducciones a PM2.5 reducirían la carga de síntomas de ansiedad que sean clínicamente más relevantes.
