Neurología
Tabaquismo puede aumentar la esclerosis múltiple
Los mecanismos por los que el hábito modifica el riesgo y posiblemente la progresión de la enfermedad son aún desconocidos. En este sentido, los biomarcadores asociados a degeneración axonal podrían proporcionar una herramienta útil.
La esclerosis múltiple (EM) es una enfermedad autoinmune de etiología compleja, hoy por hoy desconocida, en la que factores genéticos y ambientales determinan la susceptibilidad. En los últimos años, el efecto del tabaco ha sido uno de los factores ambientales que ha emergido en la EM, y se ha asociado tanto a un aumento de la susceptibilidad como a un incremento de la progresión.
Maialen Arruti y colegas del Hospital Universitario Donostia, en San Sebastián, España, revisaron la evidencia actual sobre el papel del tabaco en la afección neurológica. Se incluyó una actualización de los estudios publicados que han analizado distintos aspectos del tabaco en la EM: vías patogénicas implicadas, asociación del tabaco y riesgo de EM, interacción con otros factores de riesgo y efecto del tabaco en el curso de la enfermedad.
Finalmente, los estudios observacionales demuestran que el tabaquismo incrementa de forma significativa el riesgo de EM (odds ratio de 1,5) y es un factor de riesgo independiente. Sin embargo, la EM es una condición compleja y el aumento de riesgo por el tabaco puede diferir en función de la interacción con otros factores genéticos y ambientales. El papel del tabaco como factor de progresión es más controvertido, con resultados contradictorios y estudios de gran variabilidad, lo que dificulta establecer una conclusión firme. Los mecanismos por los que el tabaquismo modifica el riesgo y posiblemente la progresión de la enfermedad no son aún conocidos.
