Imitando a las plaquetas
Los recientes avances en nanotecnologÃa han permitido diseñar partÃculas revestidas de membranas celulares cargadas con fármacos, como antibióticos, lo cual tiene una prometedora proyección terapéutica. Adicionalmente, ha habido un interés particular por nanopartÃculas recubiertas con membranas de plaquetas, las que presentan una morfologÃa y propiedades tipo plaqueta, lo cual se logra con la presencia de proteÃnas celulares en su superficie, facilitando la unión a componentes subendoteliales. De esta forma se pretende contribuir a mejorar patologÃas como el cáncer y varias condiciones inflamatorias asociadas a daño vascular. Por otro lado, estas partÃculas pueden enfocarse a bacterias especÃficas que normalmente tienen como blanco a las plaquetas durante el curso natural de su infección, potenciando y dirigiendo la entrega del fármaco, lo cual podrÃa mejorar los actuales tratamientos para combatir enfermedades infecciosas.
NanotecnologÃa
El desarrollo de nanopartÃculas que puedan transportar drogas hacia sitios de interés en el cuerpo promete una administración más segura y efectiva resolviendo una infinidad de problemas médicos. Ha resultado difÃcil crear la compleja superficie externa que permita a estos nanotransportadores someterse a interacciones biológicas normales. Sin embargo, orientándose hacia la naturaleza para encontrar claves de diseño, los cientÃficos han comenzado a desarrollar tales nanoparticulas biomiméticas. En una publicación reciente Che-Ming J. Hu y colaboradores (doi:10.1038/nature15373), reportaron que nanopartÃculas recubiertas con la membrana de plaquetas estaban protegidas de la respuesta inmunológica del organismo y que poseÃan propiedades tipo-plaquetas que les permiten unirse a células y tejidos objetivo. Junto a amplias implicaciones terapéuticas, el estudio desdibuja la lÃnea entre la ciencia de los materiales y la bioquÃmica, introduciendo técnicas que podrÃan beneficiar tanto a la investigación de biomembranas y a la nanoingenierÃa.
Cuando los vasos sanguÃneos se dañan, la lesión expone proteÃnas como el colágeno, que son abundantes en la capa subendotelial, debajo del revestimiento de los vasos. Las plaquetas - fragmentos celulares pequeños, no nucleados, unidos a la membrana y que circulan en la sangre - se unen a estas proteÃnas con fuerte afinidad y luego liberan factores de coagulación, promoviendo la formación de un conglomerado plaquetario que ayuda a sanar la herida. Debido a que muchas condiciones, incluyendo el cáncer, inflamación y traumatismos, están asociados con daño vascular, las plaquetas han inspirado varias investigaciones acerca de la entrega de fármacos. Las nanopartÃculas han sido diseñadas para desplegar ligandos plaquetarios en su superficie, lo que facilita la unión a componentes subendoteliales. Adicionalmente, la morfologÃa de estas células anucleadas y los mecanismos de coagulación han sido modelados, con el objetivo de mejorar la administración de fármacos. Sin embargo, estos esfuerzos han fallado en producir nanopartÃculas que puedan verdaderamente imitar el comportamiento de las plaquetas.
Las plaquetas también han atraÃdo el interés en estudios de enfermedades infecciosas, dado que varias especies bacterianas expresan proteÃnas de superficie que interaccionan con los receptores plaquetarios. Esta interacción se ha relacionado con complicaciones letales durante el curso de una infección. Por ejemplo, el alto volumen sanguÃneo que pasa a través de las válvulas del corazón hacen esa zona susceptible de lesiones, y en la endocarditis infecciosa, microbios invasores se adhieren a las superficies de las válvulas lesionadas promoviendo aún más agregación plaquetaria. Este es un serio desafÃo terapéutico debido a que los microbios encerrados en coágulos son inaccesibles al tratamiento antibiótico y evaden la respuesta inmunológica. Sin una intervención efectiva, aproximadamente el 40% de los pacientes hospitalizados mueren al contraer endocarditis infecciosa.
Figura 1: diseñando nanotransportadores
Hu y colaboradores han desarrollado transportadores que mejoran la administración de fármacos a objetivos deseados. Los autores aislaron membranas de plaquetas de sangre humana para recubrir nanopartÃculas sintéticas cargadas con fármacos. Estos nanotransportadores imitan las propiedades biológicas de las plaquetas, lo que les permite evadir la detección inmunológica en el cuerpo. Además, se pueden unir a la capa subendotelial expuesta de vasos dañados, mejorando la administración de fármacos para muchas enfermedades asociadas a daños vasculares, incluso mejorar la entrega de antibióticos contra bacterias en el organismo (adaptado de: http://dx.doi.org/10.1038/nature15373 Nature (2015)).
Los investigadores responsables del estudio habÃan desarrollado previamente nanopartÃculas recubiertas con membranas de eritrocitos y de células cancerÃgenas, demostrando que se pueden utilizar para neutralizar toxinas bacterianas y para vacunación contra el cáncer, respectivamente. Sobre la base de este éxito, Hu y colaboradores, desarrollaron nanopartÃculas poliméricas recubiertas con la membrana de plaquetas, las que imitan muchas de las funciones biológicas de este tipo celular (fig. 1). Inculcar propiedades tipo plaquetas a las nanopartÃculas era un desafÃo notable, pero los autores aprovecharon el hecho de que hay una distribución de carga diferencial entre la superficie externa e interna de la membrana plaquetaria, debido a la abundancia de moléculas de ácido siálico cargadas negativamente en la superficie externa. Entonces, se sintetizaron nanopartÃculas cargadas negativamente y asÃ, a través de repulsión electrostática con las membranas externas plaquetarias, las partÃculas preferentemente se unen a la membrana interna.
Estos investigadores poseen un conjunto más completo de proteÃnas de membrana que nanoformulaciones tipo plaqueta anteriores -las nanopartÃculas se recubrieron en 15 componentes de unión inmunomoduladores y subendoteliales. Esta capa de membrana permitió que las partÃculas se unan eficazmente a colágeno humano en ensayos in vitro, y lograron ser dirigidas a regiones dañadas en vasos sanguÃneos aislados. Los autores demostraron que los nanotransportadores evadieron con éxito la detección inmunológica celular, evidenciando buena tolerancia en roedores.
El estrechamiento de arterias o válvulas como resultado de la proliferación celular excesiva, puede plantear problemas después de la cirugÃa correctiva. Esta nanoformulación impidió efectivamente el estrechamiento conocido como restenosis, en experimentos realizados en ratas. Las nanopartÃculas unidas selectivamente a arterias lesionadas permitió la liberación sostenida de un fármaco antiproliferativo.
Tal vez, es aún más interesante la capacidad de las nanopartÃculas de dirigirse a especies bacterianas que se adhieren a las plaquetas. La entrega de antibióticos dirigida es un tema de investigación importante dada la creciente amenaza de la resistencia. Sin embargo, la identificación de una partÃcula dirigida a patógenos que sea inyectable y ampliamente aplicable, ha sido un obstáculo técnico al desarrollo de nanotransportadores antibacterianos. Los autores mostraron que su tecnologÃa podrÃa superar este desafÃo para la bacteria Staphylococcus aureus, un patógeno común. En comparación con el antibiótico libre, las nanopartÃculas mejoran la entrega hacia los microorganismos tanto in vitro como en ratones infectados. Esta capacidad de dirigirse especÃficamente a microbios, podrÃa permitir hacer frente a complicaciones graves relacionadas a la infección, tales como la presencia de bacterias en la sangre, lo que puede causar sepsis y propagación de la infección. Por otro lado, aumentando las dosis de fármacos dirigidos a estos patógenos, estas nanopartÃculas ofrecen la esperanza de potenciar la baja efectividad de algunos antibióticos.
Dado el carácter innovador de los nanotransportadores, los estándares regulatorios de manufactura deben establecerse antes que puedan ser utilizados en la clÃnica. La década pasada se evidenció un considerable avance en el establecimiento de mejores prácticas en esta área -han habido mejoras en el procesamiento de productos de sangre humana para mejorar su preservación y función, y por otro lado, han sido diseñados nanotransportadores sintéticos que han sido utilizados en ensayos clÃnicos en humanos. Finalmente, deben tenerse en cuenta riesgos adicionales al diseñar estas moléculas que combinan componentes biológicos y sintéticos, sin embargo la industria biotecnológica cuenta con procedimientos de operación que cumplen con los estándares requeridos. Estos son tiempos emocionantes en nanomedicina. Las nanopartÃculas bio-miméticas marcan una nueva frontera, proporcionando una visión hacia el futuro en este campo.
Fuente bibliográfica
Platelet mimicry
Omid C. Farokhzad
Laboratory of Nanomedicine and Biomaterials, Brigham and Women’s Hospital and Harvard Medical School, Boston, Massachusetts, USA.
doi:10.1038/nature15218
