Desde que comenzó esta pandemia, en la década de los ochenta, 32 millones de individuos en el mundo han fallecido producto de enfermedades concomitantes al sida. En ese contexto, la profilaxis preexposición (PrEP) es el último esfuerzo destinado a ampliar las opciones de prevención combinada en grupos clave. 

Tanto el número de aplicaciones de la PrEP como su repercusión están aumentando a nivel mundial. Sin embargo, su alcance y cobertura fuera de los Estados Unidos aún son limitados.

En esa línea, el Ministerio de Salud Pública (MSP) habilitó en la Unidad de Atención Integral (UAI) del Hospital General Docente de Calderón (HGDC) el servicio de PrEP, el cual cuenta con un equipo integral y multidisciplinario de médicos, enfermeras, bioquímicos farmacéuticos, psicólogos y laboratoristas. 

Esta iniciativa también se extenderá a tres hospitales ubicados en Machala, Guayaquil y Manta y dos centros de salud de Esmeraldas y Azuay. Además, se ampliará a 51 UAI de VIH para parejas serodiscordantes, lo que ratifica el compromiso del MSP con la protección de la salud y bienestar de las personas, sin dejar a nadie atrás.

Para la doctora Gabriela Pertuz, consultora nacional de OPS/OMS en sistemas y servicios de salud, la aplicación de estrategias como esta “tiene una efectividad mayor al 90% y además se convierte en punto de entrada para que la población clave acceda a estos servicios”.

Para este objetivo, explicó, “es fundamental implementar acciones para eliminar el estigma y discriminación. Considerando que en América Latina y El Caribe aún se diagnostican alrededor de 120 mil infecciones de VIH anualmente”.