El Hospital Pediátrico Baca Ortiz de Quito tiene como misión prestar servicios de salud con calidad y calidez en el ámbito de la asistencia especializada, a través de su cartera de servicios cumpliendo con la responsabilidad de promoción, prevención, recuperación, rehabilitación integral, docencia e investigación conforme con las políticas del Ministerio de Salud Pública (MSP) y el trabajo en red.

En su compromiso con la atención integral y oportuna de la población infantil, la institución reactivó sus servicios clínicos, quirúrgicos y de consulta externa debido a la disminución de casos de COVID-19, eso sí manteniendo un área restringida para estos pacientes.

Las atenciones quirúrgicas, que debieron reprogramarse a causa de la pandemia, así como de emergencias no se han suspendido, para cautelar la salud y vida de los infantes que asisten al recinto de salud.

Además, se está trabajando en la adquisición de más de 100 medicamentos esenciales, tanto para cirugías como para tratamiento de enfermedades graves y catastróficas, incluyendo a pacientes trasplantados. 

Con estas acciones el establecimiento quiteño se compromete con mejorar la accesibilidad y el tiempo de espera para recibir atención, considerando la diversidad cultural, generacional, socio económica, de género, lugar de origen y discapacidades.