

capítulo 2: Semiología
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sobre todo en términos de trámites de inmigración, previsión, hacinamiento y disponibilidad de
las mínimas condiciones de higiene.
Registro de la información
Hoy en día,
la pediatría como especialidad médica ha sufrido importantes cambios
.
Muchos de ellos, derivados de profundas modificaciones en la epidemiología de las enfermedades
propias de la infancia y el período neonatal. Estos cambios producidos por la mejoría de la desnu-
trición, particularmente en nuestro país, incluso llegando a la
obesidad
como el más importante
problema de salud pública en la infancia; cambios observados en las enfermedades transmisibles
y susceptibles de erradicar a través de vacunas, como ha sido el caso de la viruela, poliomielitis,
difteria, sarampión, rubéola, parotiditis viral. Sin embargo, la globalización nos suele sorprender
en salud, a veces con brotes aislados de las enfermedades mencionadas incluso en Europa, como
ha sido el caso reciente de difteria en España, sarampión en Alemania, aunque constituyen casos
aislados y rápidamente resueltos.
La reaparición de enfermedades infectocontagiosas que se creían superadas, o al menos con-
troladas, como la tuberculosis, lepra y las infecciones de transmisión sexual (ITS), entre ellas la sífilis
y gonorrea o la aparición de nuevas enfermedades (VIH) han obligado nuevamente al pediatra a
un estado de alerta. Revisando los antecedentes en la historia clínica suele desprenderse algunos
indicadores que permiten la sospecha clínica a confirmar. Los servicios clínicos, particularmente
del sistema público han debido revisar sus protocolos de sospecha clínica, incorporando nuevas
patologías o patologías reemergentes.
Participación en la entrevista
La entrevista puede desarrollarse en el hospital o clínica después del parto, en la consulta
ambulatoria, en un box de emergencia, en la sala de hospitalización o en una visita domiciliaria.
Muchas veces también, sobre todo en situaciones de conflicto potencial, un pediatra con algún
rango de jefatura debe entrevistarse con los padres reclamantes. En todas estas situaciones la
entrevista debe realizarse con un nivel mínimo de condiciones físicas y comodidad que permita el
necesario grado de respeto, privacidad, confianza e incluso seguridad para el pediatra y la familia,
debiendo muchas veces acompañarse por otro colega, profesional de colaboración médica o de
servicio, que aparte de servir de testigo permita evitar situaciones de violencia motivados por el
estrés que significa un hijo enfermo.
La participación en la entrevista médica de ambos padres es crucial. De hecho, en algunas
oportunidades por propia decisión de ambos padres, asisten a una
entrevista prenatal
con el
pediatra, oportunidad que le permite al especialista la toma de conocimiento y el eventual rol
asumido por los futuros padres, entregando incluso algún antecedente de trascendencia (curso
del embarazo, causas de fallecimiento en la familia, enfermedades crónicas de base metabólica o
genética). Hoy en día, en los controles pediátricos suele suceder que el padre asiste a la primera
entrevista, a lo sumo a la segunda y posteriormente asiste solo la madre (a veces con la abuelita).
También con alguna frecuencia asiste solo el padre a control con su hijo y, aunque muy motivado,
puede apreciarse un importante desconocimiento de la enfermedad motivo de consulta, los hitos
de desarrollo, vacunas recibidas o tipo de alimentación.
Psicodiagnóstico
Es muy importante que el médico entrevistador pueda ser capaz de percibir las condiciones
de salud psicológica y emocional del niño y de sus padres. Si bien lo habitual es que el niño vaya
acompañado de su madre, en muchas oportunidades puede acudir el padre con su hijo al consul-
torio, relatando en forma poco precisa los síntomas de su hijo e incluso en muchas oportunidades
solicitando se le permita comunicarse con la madre del niño para informarse respecto al inicio de
la enfermedad, sus síntomas principales y los medicamentos que ha recibido. Ocasionalmente, en
situaciones de riesgo de ruptura de pareja o distanciamiento de hecho, el pediatra asiste a una dis-