Table of Contents Table of Contents
Previous Page  48 / 64 Next Page
Information
Show Menu
Previous Page 48 / 64 Next Page
Page Background

108

al describir las BK de control de tratamiento

como pacientes tratados anteriormente. Hemos

examinado la situación de estos registros en una

población usuaria de un Servicio de Salud de la

Región Metropolitana, en un momento que Chile

presenta baja prevalencia de tuberculosis, pero

con un enlentecimiento en la reducción de la in-

cidencia

11

. Esto supone que la red de laboratorios

de TB responda de manera organizada, dando

cobertura a los niveles intermedios y locales.

No conocemos reportes previos, por lo que cabe

preguntarse si esta situación es propia del SSMS

o refleja un problema compartido con los demás

servicios del país. En el Laboratorio de referencia

del Servicio de Salud Metropolitano Oriente el

21% de los formularios recibidos en el 2º tri-

mestre de 2011 no cuentan con el antecedente de

tratamiento (VT/AT) (Bioquímica Andrea Searle,

comunicación personal).

La localización de casos constituye una activi-

dad de salud pública. Para disminuir la transmi-

sión de la tuberculosis todo el personal de salud,

cuando se enfrenta a un paciente que consulta

con síntomas respiratorios debe involucrarse en

la solicitud de la baciloscopía. El tamizaje de

ningún modo es una acción específica médica

ni exclusiva del equipo técnico de TB

2

. Hay que

considerar que en Chile en 2012 (evaluación

del Programa TB del ISP) se realizaron 281.161

baciloscopías y 181.941 cultivos de diagnóstico.

Esto permitió pesquisar 1.392 casos de tubercu-

losis bacilífera y 511 TB sólo por cultivo, pese

a que operacionalmente la actividad de pesquisa

en sintomáticos respiratorios está muy deterio-

rada (muy por debajo de la meta de realizar 50

BK de diagnóstico por cada 1.000 consultas de

morbilidad de adultos)

2,11

. Se puede postular que

además de las deficiencias en la oportunidad de

solicitar el examen de BK, de infraestructura de

los laboratorios con dificultades de adquisición

de insumos, equipamiento y personal capacitado,

se suma la falta de registros adecuados de los

formularios de investigación bacteriológica, que

favorecería el incumplimiento de las técnicas

requeridas para pesquisar tuberculosis en todas

sus formas y mejorar el control del tratamiento.

Es así que hay que mantener múltiples cometidos:

una capacitación continua de los equipos locales

que incentive la pesquisa a través del tamizaje

de los sintomáticos respiratorios que consultan

y el control mensual con baciloscopía durante el

tratamiento de la TB

12,13

, maximizar el nivel ope-

rativo de la red de laboratorios para el control de

la tuberculosis, manejar la TB multidrogorresis-

tente (resistente a rifampicina e isoniazida: TB-

MDR)

2,4

e impulsar actividades de colaboración

con otros programas

14

–de control de enferme-

dades respiratorias del adulto (ERA), Programa

Cardiovascular que incluye a los diabéticos,

intervenciones relacionadas con la co-infección

(Programa VIH/SIDA) y realización de bacilos-

copías a embarazadas y pacientes postrados si se

mantienen sintomáticos respiratorios.

Uno de los problemas es que actualmente se

está usando una gran variedad de formularios de

solicitud de investigación bacteriológica en el

SSMS. Menos de la mitad contiene los enuncia-

dos adecuados a la norma

(información VT/AT

y drogas utilizadas en pacientes antes tratados

y durante el control de tratamiento). De todas

formas lo que especifica el 96,6% (información

VT/AT) ya permite decidir implementar las téc-

nicas de cultivo y pruebas de susceptibilidad a las

drogas en la red de laboratorios (toda vez que se

registren los antecedentes expuestos en la Tabla

1). Una menor proporción (3,4%), utiliza órdenes

de otro tipo (de exámenes de bioquímica) que no

provee ninguna referencia a tuberculosis. Se esti-

ma que el formulario de solicitud de baciloscopía

no acompaña a la evolución de los procedimien-

tos que se realizan actualmente en el laboratorio

y se puede concebir que el tipo de formulario

condicione la omisión y la calidad del llenado.

Esporádicamente otros establecimientos y

servicios de salud han simplificado la solicitud

de investigación bacteriológica, con formularios

dobles auto-copiativos de pesquisa y de otro color

para las BK de control de tratamiento e incluso

se ha propuesto incluirla en el formulario de exá-

menes del perfil bioquímico, que sólo indica el

nombre, el sistema numerado de identificación in-

dividual: “rol único nacional” (RUN) del paciente

y la procedencia. Se pretende funcionalidad,

minimizar las tareas y que sea más expedita, con

el argumento de buscar después los antecedentes

de las pocas muestran que resultan positivas. Sin

embargo, es fácil imaginar el trabajo posterior de

encontrar el domicilio, el consultorio que mane-

jará al paciente (especialmente si no está inscrito

al momento del diagnóstico) y los antecedentes

para tomar decisiones en el laboratorio y en el

programa de TB local de manera oportuna. Por

otra parte, se plantea incluso a nivel nacional

implementar la realización de BK con el agre-

gado de cultivo de todas las muestras, y estudio

de susceptibilidad a drogas antituberculosas de

todos los cultivos que resulten positivos con co-

lonias de micobacterias. Sin duda es un proyecto

ambicioso, que supone aumento de los costos y

del trabajo de los laboratorios de referencia y de

la Sección Micobacterias del ISP. En la visita de

la Organización Panamericana de la Salud (OPS)

Rev Chil Enf Respir 2014; 30: 103-110

p. Ramonda C. et al.