Gastroenterología
Niños prematuros y de bajo peso tienen mayor riesgo de adenocarcinoma de esófago
Un creciente número de estudios han ligado ciertas exposiciones en el período perinatal a enfermedades de la edad adulta tales como patología cardiovascular y cáncer. El reflujo gastroesofágico ocurre con frecuencia entre recién nacidos, y específicamente para los infantes de pretérmino y de menor edad gestacional representa un riesgo particularmente alto. De hecho, un estudio iniciado en 1999 encontró que 1 de cada 5 lactantes prematuros admitidos en unidades neonatales de cuidado intensivo de los Estados Unidos fueron tratados para reducir el reflujo gastroesofágico. A pesar de ser algo común entre estos infantes, el reflujo gastroesofágico es también un potente factor de riesgo para el cáncer de esófago entre adultos. En una cohorte establecida para el estudio de exposiciones perinatales en lo referente al riesgo de cáncer de mama y testicular, el Dr. Magnus Kaijser y colaboradores (Unidad de Epidemiología Clínica, Departamento de Medicina del Hospital Karolinska, Estocolmo, Suecia), investigaron la asociación entre nacimiento de pretérmino y/o menor edad gestacional y el desarrollo de cáncer de esófago.
Los autores estudiaron entre 1925 y 1949 una cohorte de 3364 individuos prematuros y/o edad gestacional disminuida, para así determinar el riesgo a largo plazo de cáncer esofágico. Los resultados indicaron que la tasa de incidencia estandardizada para el adenocarcinoma de esófago aumentó más de siete veces en la población de estudio (riesgo de 7.27; IC del 95%, 1.98-18.62). Un peso de nacimiento menor a 2000g estuvo asociado con un aumento del riesgo de once veces (riesgo de 11.5; IC del 95%, 1.39-41.5).
En conclusión, tales asociaciones podrían ser explicadas por el creciente número de reflujos gastroesofágicos durante la infancia en niños de pretérmino y/o de menor edad gestacional.
Fuente bibliográfica
Gastroenterology. 2005 Mar; 128(3):607-9