The Lancet
Aerosoles nasales acortan infecciones y reducen el uso de antibióticos
Además de la actividad física y el manejo del estrés, esta simple intervención disminuye la necesidad de medicación.
Cada año, la mayoría de las personas sufre alguna infección respiratoria, lo que frecuentemente lleva al uso de antibióticos. Sin embargo, la evidencia que respalda la efectividad de alternativas como los aerosoles nasales, la actividad física y el manejo del estrés para disminuir la duración de estas infecciones es limitada.
Este estudio, dirigido por el Dr. Paul Little de la Universidad de Southampton en el Reino Unido, buscó evaluar el impacto de los aerosoles nasales y de una intervención conductual en las enfermedades respiratorias, comparándolos con la atención estándar.
Se realizó un ensayo aleatorizado en 332 consultorios médicos del Reino Unido con 13.799 adultos mayores de 18 años, todos con al menos un factor de riesgo para enfermedades respiratorias (inmunosupresión, afecciones cardíacas, asma, diabetes, obesidad). Los participantes se dividieron en cuatro grupos: cuidado estándar (consejos breves sobre manejo de la enfermedad; n= 3.451), aerosol en gel (dos aplicaciones por fosa nasal al primer signo de infección o tras exposición potencial, hasta 6 veces al día; n= 3.448), aerosol salino (dos aplicaciones por fosa nasal en las mismas condiciones; n= 3.450) y una intervención conductual breve con acceso a un sitio web que promovía la actividad física y el manejo del estrés (n= 3.450). Se evaluó la duración de las infecciones respiratorias (tos, resfriados, dolor de garganta, sinusitis, infecciones de oído, influenza, COVID-19) en un periodo de 6 meses, así como los efectos adversos y el uso de antibióticos.
En comparación con la atención estándar, que registró una media de 8,2 días de enfermedad, el grupo que usó aerosol en gel tuvo significativamente menos días (media: 6,5 días), al igual que el de aerosol salino (media: 6,4 días), mientras que el grupo asignado al sitio web conductual no mostró diferencias significativas (media: 7,4 días). El efecto adverso más común fue el dolor de cabeza o sinusal, con mayor incidencia en el grupo de aerosol en gel (7,8%). Todas las intervenciones redujeron el uso de antibióticos frente a la atención estándar (IC 95%).
En conclusión, el uso de un spray nasal disminuyó la duración de las enfermedades respiratorias, y tanto este como el sitio web sobre comportamiento redujeron la necesidad de antibióticos. Las investigaciones futuras deberían enfocarse en evaluar el impacto de la implementación generalizada de estas simples intervenciones.
Fuente bibliográfica
Nasal sprays and behavioural interventions compared with usual care for acute respiratory illness in primary care
Little P, et al. Primary Care Research Centre, University of Southampton
Lancet Respir Med. 2024 Aug;12(8):619-632