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Nutrición en fibrosis quística
Francisco Moraga M.
CAPÍTULO 3
El apoyo nutricional de pacientes con fibrosis quística (FQ) constituye uno de los 4 pilares del
tratamiento: un estado nutricional normal se asocia a mejor función pulmonar y ésta a la sobre-
vida, en tanto que la malnutrición se asocia a mayor morbimortalidad. Un patrón de crecimiento
normal es un objetivo terapéutico, debiendo ser éste multidisciplinario, anticipatorio, oportuno
y eficaz.
Los pilares del tratamiento son cuatro:
1. Tratar la infección, la inflamación y el aclaramiento mucociliar (tratamiento farmacológico).
2. Mantener un buen estado nutricional y tratar la insuficiencia pancreática.
3. Realizar fisioterapia para movilizar las secreciones respiratorias espesas.
4. Detectar y tratar las enfermedades asociadas: diabetes relacionada con la fibrosis quística
(DRFQ) y enfermedad hepática relacionada con la fibrosis quística (EHAFQ).
El compromiso nutricional es multifactorial, destacando disminución de ingesta por anorexia,
aumento de requerimientos por infecciones, mayor trabajo respiratorio y aumento de las pérdidas
por diversos grados de esteatorrea que acompañan a la insuficiencia pancreática y al compromiso
hepático, a lo que debe sumarse las comorbilidades asociadas como enfermedad celíaca y diabetes
mellitus.
La intervención nutricional debe ser precoz para lo cual deben efectuarse controles regulares
especialmente durante los períodos críticos: al momento del diagnóstico, el primer año de vida,
el período puberal y durante exacerbaciones o infecciones. Se recomienda controles mensuales
durante los períodos críticos y cada 3 meses en el resto de los pacientes, con ajustes en cada caso
en particular.
Requerimientos nutricionales
Energía
1,2 a 1,6 veces las recomendaciones para la edad, dependiendo de la gravedad de la enfer-
medad y del compromiso pancreático. La Fundación Americana de Fibrosis Quística recomienda
ingestas que van del 1,1 a 2,0 veces las RDI (Figura 1).
Proteínas
100% de la recomendación para la edad (RDI 2002) y en preescolares asegurar
≥
13 g proteí-
na/día entre 2-3 años y
≥
19 g proteína/día hasta los 5 años. Adecuar a P%15.
Grasas
Entre un 35-45% del aporte energético total (dependiendo de la edad), considerando un
3-5% como ácidos grasos esenciales (AGE); se ha documentado una disminución del ácido
linoleico y del docosahexahenoico pero no hay aún evidencia suficiente para recomendar su
suplementación en forma rutinaria.
Micronutrientes
Respecto a vitaminas, existe déficit subclínico de las liposolubles A, D, E y K, lo que hace reco-
mendable la medición anual de niveles plasmáticos. A continuación se presenta la recomendación
de ingesta de vitaminas en pacientes con FQ en base al preparado AquADEKs
®
, específico para
pacientes con FQ que, además, considera aporte de vitaminas hidrosolubles.